jueves, 28 de mayo de 2015

PRÓVIDO SE MOSTRÓ MAYO



        Próvido fue el mes en mudanzas, lo que es de loar y no de denostar ya que con esa avalancha de alteraciones, en lo que a la atmósfera se refiere, dio satisfacción a todo el mundo: a los que aman el estremecimiento que produce el contacto de la piel con el frío; a los que se encuentran más acomodados con el fuego del sol e, incluso, a los que no cambiarían nada por un día en que los cielos se muestran inclementes, y para su felicidad contemplan gozosos el espectáculo que ofrece  el correr presuroso de los vientos, no dejando nada inmóvil a su paso, y el azote de la lluvia purificando hasta la extenuación cuando cae desbocada todo lo visible y lo oculto a nuestros ojos.
     En distinto escenario, tampoco escatimó el mes otras bravuconearías, colmando gustos e ilusiones, que no nos toca juzgar porque cada cual tiene sus preferencias y porque sin daño y con placer transcurrieron: épicas carreras, para los deportistas; románticos festejos para los que añoran lo que de bueno tuvo otras épocas, elecciones, para los que le gustaría cambiar el mundo, romerías para los que persiguen a las Vírgenes por otras tierras. Y como obligado epílogo nuestro, el suspiro hondo, de alivio, porque también sin otros males ni sinsabores que los habituales vimos nacer y desaparecer a este mayo.

miércoles, 27 de mayo de 2015

BRINCOS TEMPORALES QUE AFECTAN


      Estos brincos del tiempo, mostrando cada día una faz distinta, sabido es que altera los nervios más templados, pero, en idéntica medida, tienen una incidencia demoledora en esa otra onírica existencia por la que caminamos mientras se supone que descansamos de los afanes a que nos somete la vida cuando estamos despiertos. En ocasiones muestran los sueños las obsesiones y malestares del espíritu, las que están presentes en todo momento, dormidos o en vela; sin embargo, en otras, son tan extraños y alejados de la realidad de nuestras vidas lo que nos sucede, que no sólo no tendríamos que tener a nuestro lado un personaje descubridor de la verdad que encierran, alguien así como un Freud, sino que cabe preguntarse si nuestros ascendientes también nos trasmiten ocultos en sus genes,  igualmente, una parte de los mismos sueños de los que en remotas épocas a ellos o bien le atormentaron o de sucesos de los que realmente fueron protagonistas.

martes, 26 de mayo de 2015

SI BIEN SE MIRA, ZAIDE


      Si bien se mira, Zaide, muchas son las divisiones que podrían hacerse en nuestro humano mundo, innumerables si se quiere, no nos cabe duda. Pero detengámonos hoy en una de ellas, en la de que al planeta tierra lo ocupan dos vastos grupos de inamovible asiento: los que tienen y los que no; llámese a la posesión, poder, riqueza, abundancia o, en otro aspecto menos decisivo, belleza, bondad o conocimiento. Y si bien en estos últimos pocas veces nos es dado intervenir para transmitirlos con eficacia, sí que culpa y grande, atribuible a los que con algo contamos, es no remediar a los que de todo carecen. Tenlo muy en cuenta, amigo mío,  y medítalo antes de decir no, siempre que una mano pida la tuya para que la remedie cuando las desgracias la cercan, ya sea debida a  amarga pobreza,  a lastimosa enfermedad o a cualquier otra causa de terribles consecuencias para los que la padecen. Con la compasión, por muy sentida que sea, no basta.

lunes, 25 de mayo de 2015

PARA NO IGNORAR EL DÍA DE AYER



      Lo sensato (para ir un poco a contra corriente de lo que todo el mundo comenta esta mañana casi primaveral, o lo que es decir con el tiempo estabilizado, ya que en ella estamos), es ignorar que ayer fue día de elecciones, copando la actividad material o intelectual de gran parte de los habitantes del país; bastante más de asociaciones políticas, afiliados y obsesos seguidores de sus líderes o de los ideales del partido.
       Más que de los resultados de los comicios, nada más que lo esperados con nuevos nombres y facciones irrumpiendo en el vasto escenario de los que aspiran de una u otra forma a ser parte integral de algún gobierno, nos quedamos con esa muda protesta de los que en nuestra población no se acercaron a las urnas. No se olvida por mucho que se pretenda enmascararlo, que al tradicional olvido con que se trata a estas tierras desde no se sabe cuándo, se une ahora el desánimo y el desprecio que ha generado la actuación generalizada de unos gobernantes tan despreciables como dignos de pagar con largos años de prisión sus desfalcos y corruptelas. Algo de lo que todos somos conscientes no va a ocurrir.

     

jueves, 21 de mayo de 2015

GLORIOSO AMANECER DE LOS BUZONES


     ¡Quién lo diría! Vive el buzón de nuestra casa, y no por ostentoso, que bien modesto es, en estos últimos días, un período de afanosa prosperidad. De tanto esplendor, con su metálico vientre repleto de correspondencia y abigarrados cartones y folletos, con un ir y venir sin tregua de carteros y pseudocarteros poniendo a prueba con sonoros golpes la solidez de sus fauces, mucho tiempo clausuradas por el tedio, que hasta dar con la solución de ese repentino prodigioso renacer, nos da un vuelco el corazón pensando que, como antaño, vuelven a ganar fronteras las aladas misivas entre amigos y familiares, como espabilados mensajeros de nuestras confidencias.
         Un misterio y un júbilo que no tarda en desvanecerse nada más contemplar el contenido que guarda en su interior el paciente buzón: una abrumadora publicidad de partidos, por un lado; y de otro, de sobres con el voto para las próximas elecciones. Un derroche sin igual, no sólo porque en casa   somos nada mas que dos, y pudiérase con lo que hay votar hasta una docena de personas y a una docena de formaciones, sino porque retirada la electiva carga, al día siguiente el buzón, milagrosamente, luce  como si no hubiera sido desalojado en su integridad: hasta arriba de papeles con idéntica llamada. Y luego que el dinero escasea, para lo que nunca debiera  escasear. ¿Votaremos a alguien? 


lunes, 18 de mayo de 2015

LO QUE MUDA Y LO QUE NO CAMBIA.



      Con los soles desmesurados de estos días campando a sus anchas como febril protagonista de la atmósfera, nos habíamos olvidado de que existían otros elementos perturbadores, entre ellos los vientos que, cuando se desmandan sacando a relucir toda su ira y arrogancia son muy de guardar. Y no porque sus embates puedan poner en riesgo nuestra integridad, aunque algo de eso no se descarta, sino en esencia, y en eso sí que nunca fallan, porque trastornan el signo de nuestros sueños, de plácidos a horripilantes, cuando dormidos; y si despiertos el de nuestros nervios, a los que igualmente despiadadamente hostigan.
      Nada nuevo, puesto que ya hace unos siglos que señalaba nuestro sabelotodo Espinel, cómo de furiosos eran en la época y el empeño que tenían en sitiar y azotar a nuestra ciudad durante interminables períodos. Todo es mudanza en la vida, e incluso en la naturaleza fustigada cada vez más obcecada e insensatamente por los humanos, quizás por eso, un poco levanta el ánimo discernir que todavía hay cosas en ella que poco cambian, molestias aparte.



domingo, 17 de mayo de 2015

PLACIDEZ EN LAS CALLES Y EN LAS CELEBRACIONES.



         Introduce un poco de placidez y frescura el aire, que curioseando por doquier en la festiva mañana, espanta algo al calor insolente de estos días. De todas formas habrá que agradecerle al tiempo, pese a los insospechados furores de un estío tan insólito y precoz, que no viniera a aguarnos todas las celebraciones que por aquí andan en el mes. La postrer de la quincena, la que intenta recrear estos días lo que de bueno tuvo una época, funesta en otros aspectos, como fue la del XIX. Lo mejor, diríamos, de toda esa explosión de colorido, mezcolanza de vestimentas, sotanas, frailes, escribanos, regidores,  mantillas, estandartes, banderas flameando, bordados, carruajes, jinetes, alazanes,  de animales enjaezados o portando cargas frutales de las huertas serranas, como si nada hubiera cambiado con un ayer lejano, es que sirviera para estrechar lazos entre poblaciones de nuestro entorno, afines a la nuestra por cientos de motivos, tanto los de olvidar como los de recordar. Poner en vereda y en orden a cuantos formaban parte de


esa muchedumbre, bien merece un elogio, más si es que algún provecho, económico y espiritual, se saca de ello, que parece que sí.

miércoles, 13 de mayo de 2015

SINGULAR OLIMPIADA SERRANA


     A los que nos intimidan las masas, no dejaban de darnos un poco de temor, el fin de semana último, todo ese enjambre de ellas y ajetreo por nuestras calles más céntricas de miles de personas comidas por un entusiasmo desbordado, que les impulsaba a recorrerlas  en bicicleta o simplemente con ayuda de sus piernas, con una pasión digna del mayor encomio. Y es que el empeño, la aventura, tenía algo de descomunal, de heroica: 101 kilómetros; ese uno, para que quedara bien patente que eran no menos de un centenar los que, sólo en un término de 24 horas,


salvarían gran parte de las más de siete mil personas; modernos atletas de esta singular olimpiada serrana; componentes de unas masas que, pese a lo dicho antes, sólo no daban miedo, sino que transmitían juventud y sana alegría a los que ya no tanto, ni de una ni de otra, nos queda.

sábado, 9 de mayo de 2015

UN SONROJO AFRICANO


                                             El calor no sólo hostiga hoy, sino que sin


disfrutar de su fugaz existencia deja a unas rosas que se diluyen en vuelos de blancos y rojos pétalos, apenas nacidas. Aire sofocante, dicen que con origen en el norte de otro continente que no es el nuestro, el de África. En pasadas épocas, estas alteraciones únicamente acaecían en el corazón del estío, subiendo un peldaño más la ascensión de un hervor que ya se había adueñado de cuanto había. Mudanzas que traen los años y el malvivir que nos rodea. Nos preguntamos si todo no será nefasta consecuencia de ese tenaz sufrimiento a que tenemos sometido al planeta, hasta hacerlo polvo de estrellas, nada; o si se tratará más bien de un clamor de auxilio, procurando nuestra atención a un continente en el que imperan y no cesan las matanzas y las guerras atroces, sin que importen un bledo el resto del mundo. Muertes inacabables de seres indefensos, paradójicamente en tierras en las que más tempranamente surgió el hombre a la luz de la inteligencia. Un sofoco, un sonrojo que no es por su calor, que gime por otra clase de vida. 

miércoles, 6 de mayo de 2015

NO AMBICIONES DEMASÍAS


      Zaide, no ambiciones demasías, ni neciamente pidas lo que, salvo imprevisibles milagros, tu existencia nunca se permitirá donarte. No clames, inconsciente, por vivir más vidas que las que tienes, que, si bien lo miras, hasta tres, en una, se te concedieron: infancia, juventud y madurez. En tomar lo mejor de lo que generosamente cada una te ofrece está la esencia de tu tranquilidad y el de hollar sin premuras el sendero que al portal de la humilde sabiduría conduce. Mírate y mira a tu alrededor y comprenderás que es un interminable milagro el amanecer y ocaso de cada día y, más aún, que tú puedas contemplarlos.

martes, 5 de mayo de 2015

UN MOLINO HARINERO EN LA SERRANÍA.



       Sería mucho pedir a estas alturas de la vida, cuando nada es lo que fue, pero como Daudet, ahora que pocos o ninguno quedan, uno daría un mundo por ser el dueño de un molino harinero abandonado; no para moler el grano, como durante siglos hiciera, sino como refugio de trasiegos y caminatas por el valle, por laderas y collados. Y en su interior, acabada la placidez de aquéllas, medrar de su soledad y silencio mientras  la tarde, cárdena, desfallece, y el rumor del río, en el silencio, es como un silbido de atención, como si anunciara que la luz se escapa y el día fenece. Y meditar sin pensar en nada y escribir de todo sin saber de nada. A divisar se acierta por una oquedad 


en el muro, que es una ojiva de eternidad, muy alto, entre una espesura que ya no es verde, la estela, un fogonazo en las cumbres, de un pueblo, que ya no es sino translúcido ópalo: es también una pizca de somnolienta eternidad.

sábado, 2 de mayo de 2015

ALGO RECOME AL MES


                                   Algo recome a mayo, dolido porque su antecesor sea el


ancestral destinatario de todas las loas primaverales, el lírico sueño de infinitos poemas y trovadores, el niño mimado del año, siendo así que él es más embajador que nadie de la floral estación, que a su socaire y sin tapujos proclaman a coro el paso tardo de los días, ya interminables, sus obsesivos soles, sus frondas, verde mar en calma, verde aceituna en agraz, el enloquecido ir y venir de aves y bichejos, todo un mundo en perenne acción y regocijo. Ni una pizca extraña, que sea su flor preferida el níveo y encopetado lirio, porque en él descarga entera, el vejado mayo, su ira, toda su fobia y lividez, y más ancho se queda.