viernes, 28 de octubre de 2011

HUELE A OTOÑO Y A FLORES.

          Huele otoño, y ya era hora, verbigracia: a calles mojadas, a montañas lavadas, a soles que juegan al escondite con nubes que pasean, a aire límpido, tornadizo a veces y jugoso, que con placer se respira.
          Se diría que es primavera, pero no por eso, aunque hay similitudes innegables en la atmósfera, sino por las flores que por doquier  tienen su imprevisto asiento no en la tierra, sino en el mármol y losetas de las calles principales. Y es que un año más, la antañona costumbre de llevar flores a nuestros muertos, o a la nada que queda de ellos, se niega a desaparecer.
          Hay verdadero hormigueo de gentes en los camposantos, aseando tumbas, dando brillo a las lápidas, enjalbegándolas, como si lo que no se hizo en vida por ellos, cuando se tuvo inmejorable ocasión, se quisiera compensar ahora. Otros, han llegado a la mejor de las soluciones: guardar un rinconcito en su corazón en el que día a día van depositando las inmarchitables flores del recuerdo. Nada mejor, nos parece si es que en vida fuimos buenos hijos, buenos esposos, buenos amigos.    

martes, 25 de octubre de 2011

LOA SIN PRETENSIONES A UN OTOÑO REMOLÓN

         Lleno de prevenciones por su demorada llegada, envuelto en turbiones y desmenuzando vientos, aguando la tierra, y lo que no lo era, hizo su aparición ayer el otoño, dando un mentís a los que lo dábamos ya por fenecido.
          ¡Bien hallado sea! Porque nos trae la diversidad en los árboles, coloreando o no de irisados matices sus hojas; en los campos, sedientos de lluvias, de fecundas sementeras y de soles benignos, gratamente acariciadores; en los cielos, tornando monótonas y hieráticas superficies celestes en un ingente mosaico de cambiantes perfiles en el que todo asombra: luces, nubes y sonoras voces de aguaceros y tormentas; y en nosotros, pobres mortales que, con calma y paciencia infinita, nos prepara día a día, hora a hora,  para otra venidera estación, la más cruda y severa;  la que en sus férreos brazos transporta el inflexible invierno.

domingo, 23 de octubre de 2011

DE SABIOS Y ARTISTAS QUE NOS LLEGAN AL ALMA

                                                                  
          Se celebra un homenaje a Ramón Corrales, al que por su condición de lo que fue en vida, bueno, sabio y emprendedor, habría que darle cada día uno. Hoy, para ello, nada mejor que nos envuelva la música que tanto amó y propagó.
          Nos encaminamos a Santo Domingo con la sombras ya de una noche espléndida reinando. Nos gusta el antiguo convento, que construyeron los monjes al borde de un precipicio para ayuda de su vida contemplativa con horizontes grandiosos si se miraba arriba; con cavernas y rocas infernales, todo un símbolo, si miraban abajo. Imponente severidad en cualquier caso la del edificio.
          Hasta su iglesia, vieja como los siglos, se cuelan sosegados los rumores de la noche y del abismo en calmosa mescolanza. El protagonismo, aparte del cumplido al homenajeado, es para José Luis Nieto, que estudió en el conservatorio que lleva el nombre de Ramón y que ha querido esta noche darle, con su presencia, un grado más de esplendor, de arte, con modestia y conocimiento de lo que son los valores y de lo que a cada persona se le debe. Y, desde luego, para llevar a cabo su loable empeño,  se supera a sí mismo. Se transforma, arranca notas imposible a un piano que no tiene más dueño que unas manos, las suyas, de virtuoso, y un vigor, un entusiasmo, que le hacen no parar un instante, recorriendo ensimismado las teclas, ya en un extremo, ya en otro, para que, por ejemplo,  esa tempestad que creara Beethoven, suene a nuestro lado con todo su fragor, su ímpetu y sonoridad; para que el mar embravecido,  vientos y borrascas, que no son sino melodías de ensueño, se nos metan muy dentro, nos lleguen al alma y nos transformen también a nosotros. Muy al final, cuando otras sonatas y preludios han completado el embrujo del recital, nos queda rondando la idea de una noche en que el desaparecido profesor, el alumno privilegiado y el público asistente, numeroso,  se pusieron de acuerdo para rendir un homenaje de los que no se olvidan.  

viernes, 21 de octubre de 2011

LO QUE DEJAN TRAS DE SÍ LOS TERRORISTAS

          El bar donde desayunamos, como queda muy próximo a su cuartel, suele ser frecuentado por miembros de la guardia civil. Al igual que todos los días, hoy se veía a gran número de ellos y la habitual rutina de mesas reunidas para acogerlos en grupos con cafés humeantes a su lado. Más que charlar de sus cosas esta mañana, sin embargo, miraban con atención al televisor,con algo de incredulidad y a lo que se repetía,  a pesar de ser noticia de ayer tarde: ETA dejaban las armas.
          Más que en ellos, al fin libre de esa pesadilla, pensé en nuestro amigo, en el militar de la esquina, al que los terroristas, de un tiro en la nuca, mataron hace unos veinte años, a un hijo, teniente del ejército, un joven que amaba los deportes, el paracaidismo, la lectura y la familia. La madre está enclaustrada en casa desde entonces, negándose a salir. ¿Qué pensará ella y su marido sabiendo que, más tarde o más temprano, los asesinos de su hijo y de las demás víctimas no tardarán en estar en la calle, vivos?

miércoles, 19 de octubre de 2011

CADA VEZ MÁS ANIMAL

                                                                  
          Este desconocido agosto, ya decíamos que no para de hacernos rabiar, escondiendo sus cartas tradicionales y mostrándonos otras que le son extrañas: cielos abiertos, soles perennes y ausencia de cualquier perturbación atmosférica. Tanto es así que hasta habría que alejarse de la población, buscando un apretado bosque para lograr ver alguna superficie cubierta con el dorado de las hojas volanderas de otras veces. Las flores, en cambio, lucen como nunca en los jardines, ajenas a cualquier fecha, tan ufanas y sin signos de marchitarse.
          Cada vez nos queda menos dudas de que algo está mudando las cosas que nos rodean. Nos enteramos hoy,  que un veterinario le ha diagnosticado al can de unos familiares, fuerte, de los que guardaban rebaños y ahora duermen en la casa, una hernia de hiato y problemas de próstata. Nada más y nada menos que idénticos males que los que uno padece. Ya que no es posible hablar de leyes de sangre o de  herencia, habrá que pensar eso: que se mire a través o al derecho, algo está transformando el acontecer de los días, de los reinos, en el que el hombre, para no perder la costumbre, se esmera por ser cada vez más animal que cualquier otro.


domingo, 16 de octubre de 2011

SE VEÍA VENIR.

          Se veía venir. No había que ser muy perspicaz. Con toda la prosopopeya que era de prever se ha puesto en escena el primer acto oficial del faraónico proyecto.
         Desde ya hace varios años, al menos tres o cuatro, venían rondando noticias lanzadas, como el que no quiere la cosa, pero con toda la intención, a ver qué tal caían; sin alarmar, no muy claras, no muy concretas; que hablaban de la posibilidad de construir un hotel o algo así en El Castillo; luego, más tarde, como si se tratara de otra cosa se habló confusamente, como se pretendía, usando eufemismos, de "Un centro de interpretación de visitantes". ¿Qué puñetas quiere decir eso? ¿Que los forasteros que nos visiten se han de poner a hacer teatro? ¿O quizás a cantar o bailar danzas nacionales? ¿Que se construye para ahorrarle andar al turista? ¿Quién ha visto un turista que no quiera andar?
          La mísera realidad es que tras todo ese despliegue de bambalinas y palabreo, se escondía un proyecto más, de los muchos que muy últimamente están mordiendo de una forma u otra a nuestro entorno más querido, a nuestra cornisa del Tajo. Bueno no uno más, éste pretende arrasar con todo lo que encuentre a su paso.
          El envoltorio, como en otras ocasiones, es de lo más seductor: poco impacto visual, no sé cuantos puestos de trabajos, cuántos hoteles, cuántos ascensores meteóricos, cuántas zonas urbanizadas, ganadas al Tajo, cuánto bien para el pueblo, para encubrir el estropicio. Al final, los puestos laborales serán los mínimos y estarán en la calle al cabo de unos días, unas semanas y el benificio un desastre; pero el mordisco habrá prendido con fuerza y su huella ahí quedará, para provecho de contadas personas y mal de la mayoría.
           Con toda la humildad del mundo, rogaríamos a  los que gobiernan nuestro municipio, que se olvidaran de quién o quienes andan tras el desaguisado, por muy famosos que sean sus promotores y pensaran, antes de decidir, que son administradores, temporales y no dueños de los bienes de la comunidad. Otra cosa, seguro que les pasaría factura. Antecedentes ya hay.

jueves, 13 de octubre de 2011

CANDADOS PARA EL AMOR

                                                                  
          En el ingente escenario del mundo, nada se ha  representado más ni con más profusión desde el comienzo de la humanidad que la obra del amor. Una pieza con diferentes actos y final incierto, que no siempre acaba en sonrisa, pero en la que todos hemos sido protagonistas directa o indirectamente alguna vez.
          En este instante en que escribimos, no sería posible contar en millones de horizontes, de rincones de esa tierra que nos cobija, las cientos de miles de forma que ese motor que mueve a nuestro planeta, el amor, se vale para expresarse. Una de las más novedosas, si es que hay algo nuevo en ese ceremonial tan viejo como el mismo mundo, es la de los candados. Nos cabe la duda de si lo que pretenden los enamorados es firmar un pacto de unión eterna, como el que simboliza ese objeto prendiéndose férreamente, con intención de durar, a la reja del balcón; o bien que nadie, salvo ellos, penetre en un terreno vedado para todos los demás, salvo para ellos.
          Por nuestra parte, más pesimistas, no sé si los que colocaron los  de la foto se habrán dado cuenta de otro simbolismo: el que representa el abismo cercano, por el que algún día podrían precipitarse  sus sueños y promesas, que creían eternas si, como en tantos casos,  se quedaran a la postre en nada.

  

martes, 11 de octubre de 2011

BUZONES PARA EL RECUERDO


         Como el antiguo andaba algo desvencijado y vetusto, hemos comprado un buzón que da gusto verlo. A menos que se estuviera sobre aviso, por el antiguo, cuando llovía, el agua se deslizaba con toda comodidad por sus cavernosas entrañas, sin consideración ninguna con lo que dentro encharcaba.
         Con ansiedad, inicialmente; con intensidad, después; por pura inercia más tarde, durante días, hemos esperado largamente su estreno: si a su fondo sombrío lo avivaba, como antaño al anterior, el blancor  rectangular de una carta, alegrando su superficie y dándole sentido a su puesta en escena.
         Hace ya otros tantos días que hemos dejado de mirar dentro; sí, desde luego, en el virtual que nos trae, casi cada par de minutos, las ondas electrónicas. Éste en pocas ocasiones falla; aunque gran parte de él nos deje insensible y nos importe menos que un bledo. Una pena, pero en tema de correspondencia el mundo anda, como casi todo, por otros derroteros, más prácticos, menos sensibleros.
           Un consejo de amigo: si como en nuestro caso, su buzón se cae de puro viejo, medítelo bien antes de sustituirlo y jubilarlo; para lo que sirve, seguro que con senecta honradez cumple; sin ningún gasto adicional, además, que no está el horno para bollos, ni siquiera de los más baratos.

         

domingo, 9 de octubre de 2011

LOS CIELOS NOS DEBEN UNA.

                                                                          
          Que un otoño tardón se vista de veranillo y hasta ose encogernos con un calor que apabulla, no es obstáculo para que un algo de la melancolía que destila la estación, sea cual sea su actividad actual, como si todo siguiera su curso habitual, se nos meta dentro para amargarnos un poco la existencia, sin que nada en particular de importancia nos suceda. Cosas del espíritu, tan inextricable como otras que nos brinda el Universo.
          Para sacudirnos de esa angustia sin causa, pequeña, pero latente, nos ilusionamos ayer con esa lluvia de meteoros, rampando a su aire, por el cielo nocturno, que nos prometían a voces los medios de comunicación. Algo tan poético y raro, si no lo fuera ya el Universo entero, como un polvo de estrellas navegando luminoso en una estelar herencia millonaria en el tiempo; desechos esplendorosos de un firmamento que jugaba a a otros equilibrios que los cotidianos; partículas desprendidas de colas de cometas embobándonos con velocidades innombrables.
          Todo quedó, para desgracia nuestra, en un guiso mal aderezado para alimentar  esa morriña. O nuestra perspectiva no era la correcta, o a nuestra vista le faltó el punto de agudeza imprescindible o,  de imaginación, para contemplar un mínimo de ese portento de ayer. Sólo una luna, hermosa, eso sí, redonda, aunque solitaria, costosa de retratar con nuestros medios, vimos en ese cielo que tanto espectáculo prometía. 

viernes, 7 de octubre de 2011

MARCHAS QUE SON CLAMORES

                                                                         
          Hay marchas que son clamores. Clamores que salen del alma en protesta de proyectos que  llenan de desánimos, a nosotros y a la gran mayoría de los que vivimos por estas benditas tierras. Abnegada marcha la que han organizado diferentes colectivos el domingo próximo día 9, a las 10,30, desde la plaza España, en el mismo rocoso corazón del espacio que se pretende mancillar, el Tajo, hasta la Casa Rúa, donde a poco tardar, salvo milagros que pocas veces suceden,  veremos llegar, grúas, obreros y camiones, mandando al contenedor de basura más cercano, la eterna e inmaculada virginidad de un entorno privilegiado con todo lo que arrastra. 
          Es la única queja que nos queda sin molestar a nadie; ni a una justicia que no se entiende dé carta blanca a edificaciones sin sentido, en un espacio presuntamente protegido, (a no ser que, como desde hace siglos,  le importe un pimiento lo que se haga por unas tierras de ignorantes), ni a un Ayuntamiento que tiene una oportunidad inmejorable para convertirse en héroe de la historia, y clamar también él aquí y allá, en el mismo infierno si hace falta, para detener un desafuero de proporciones nefastas para Ronda y para los que nos deleitamos con horizontes incomparables y con un equilibrio ecológico que va a saltar hecho añicos, sin remedio, diríamos, vistos los intereses económicos que siempre andan en juego.

ESE TESORO QUE SIN REMEDIO SE NOS ESCAPA

                                                                
          A nuestro pequeño tesoro familiar, aquel que con su brillo áureo conmemoraba hitos familiares, bodas bautizos, nacimientos o compromisos matrimoniales, algunos, puede, que heredados de nuestros antepasados, medallas, pendientes, anillos, collares o pulseras, se le está acabando el tiempo de permanecer en nuestro poder, por muchos años que llevara haciéndonos compañía. Todo cabía en una mano o en el redondo interior de un joyero de dimensiones reducidas, su morada de siempre; pero era motivo de orgullo doméstico y ante nuestros hijos y familiares cercanos alardeábamos de él en ocasiones, como si se tratara del que guarda el Vaticano: "es de oro puro", decíamos mostrando una de esas mínimas prendas.   
          Y es que a nuestro querido oro familiar le han salido un sin fín de pretendientes, y con sonado éxito por lo que comprobamos, ya que cuando vemos cerrar comercios sin parar, un día sí y otro también, con idéntica rapidez se inauguran una de esas tiendas cuyo negocio es comprar joyas en las que el  componente es el preciado metal. Que alivien situaciones apuradas de economías domésticas en peligro, no hay que dudarlo. Tampoco, sin embargo, que muchos recuerdos entrañables, con inscripciones de amor, de madre a hijo, de hijo a madre, de padrinos, abuelos, de novias, se están fundiendo en el fuego devorador de la necesidad, buscando otras formas,  a la par que el mismo metal.

miércoles, 5 de octubre de 2011

AGUAS MEDICINALES

                                                              
          Se comenta con toda razón  que para el turismo de lujo, es decir, el que practican los  dueños de grandes fortunas, la crisis es inexistente y que, incluso, estos tiempos desvastadores para la economía del común de los mortales, no son sino ríos de caudalosas aguas en el que pescan más que lo que ya poseen. Es un hecho, además, y de los más comprobados, que en estos movimientos de dinero son, desde que el mundo es mundo, las clases más débiles de la pirámide social las perdedoras; también en los rebotes.
         En Carratraca, que durante siglos tuvo gran nombradía por sus aguas medicinales, aliviando dolencias que atenazaban a habitantes de nuestra región, el balneario es hoy un lugar prohibitivo para el pueblo: un hotel de lujo, de cinco estrellas, de posesión extranjera, con precios sólo al alcance de los opulentos, acaparando el manejo de aquél, ha acabado con una tradición y , quizas, con una fuente más segura de dinero que la que ahora recibe, ya que no eran pocos los que, aunque de economía modesta, ocupaban sus pensiones y alquilaban viviendas cuando acudían a tomar los saludables baños, que ahora cuestan lo que no está escrito. 

           

lunes, 3 de octubre de 2011

UN MUNDO QUE, PARA MAL, NOS ABANDONA.

          Si las aves de nuestros campos y cielos nunca hubieran poblado la tierra, habría que crearlas que soñarlas, que adorarlas un poco, en persecución de acariciar y entender, aunque sólo sea mínimamente, ese mundo lleno de ensoñaciones, de cualidades irrealizables para los humanos; pero para salvaje y cruel, ya es sabido, pese a todo, el hombre, que alienta y estimula el  proceso inverso:  el que tiene como fin su desaparición en un suelo al que llegaron mucho antes que él.
          Sin necesidad de salir al campo, uno recuerda, no hace tanto, un Tajo hendido por aves de todo tipo, posadas en las rocas, oscureciéndolas, ornándolas, esgrimiendo su derecho a cruzarlo a su arbitrio y señorío. Espectáculo sin precedentes, por otra parte. el que se nos ofrecía cuando iniciaban el vuelo, viendo sus acrobacias y sus estridentes gritos, sintiéndose no sólo moradoras, sino monarcas de un espacio único. Eran una de las voces de nuestro abismo. Desparecieron primero las de ellas, luego la de los campesinos de las huertas, de tal forma que hoy el Tajo es un espacio sublime, pero falto de sonidos armoniosos, si quitamos el del río empequeñecido asimismo por causas no naturales.
          Nos alegra que para un grupo, escaso pero envidiables, de personas, (todos sabemos cuáles), las aves, el campo, el río, las montañas o los caminos, (o las denuncia a la justicia en defensa de ese patrimonio común)), sigan siendo para ellos un bien que hay que proteger a toda costa; porque el mundo, cuando falten, estará abocado a su fin, o será tan inhóspito que dudas generará el habitarlo, y es algo de lo que lleva tiempo alertando.
          Allí estaban ayer, y no hay que dar nombres que todos sabemos, en nuestra Alameda, celebrando el Día Mundial de las Aves, algo que no necesitan hacer, ya que es lo que desde años, día a día, hora a hora, minuto a minuto, vienen realizando. Nuestra admiración y nuestro aplauso sin medida para ellos, que no pretenden halagos ni dineros y que se dejan la vida en un empeño que quiera Dios no sea inútil.    

domingo, 2 de octubre de 2011

TAN CALLANDO

          Tan callando, como decía el poeta, se nos escurre el tiempo. Tan sin darnos cuenta que, para compensar esa alocada carrera sin vuelta atrás, bien haríamos ya que no es posible detenerlo, ni interrumpirlo, encauzar nuestras energías mientras  las tengamos en ensanchar cada instante en la única forma a nuestro alcance: llenándolo de ilusiones, de proyectos de idas y venidas, como si la vida fuera a durar siempre.
         En ese maratón en que se empeña el tiempo y en el que todos vamos quedando atrás, murió sin grandes alborotos septiembre y se nos vino encima su hermano menor, octubre, el que nos dará la mano y medirá nuestros pasos sinsabores y alegrías durante unas semanas; que prevalezcan las últimas es nuestro deseo para todos, amigos y conocidos, al menos hasta que acabe el mes, que para el siguiente ya pediremos...